martes, 28 de noviembre de 2006

Los jóvenes de los países desarrollados son infelices

Leido en la Flecha.net:

"Según un sondeo global de MTV Networks International (MTVNI, por sus siglas en inglés) que entrevistó a más de 5.400 jóvenes en 14 países, sólo un 43 por ciento de la población mundial de entre 16 y 34 años manifiesta estar feliz con su vida.

MTVNI dijo que el porcentaje se había visto disminuido considerablemente por los jóvenes del mundo desarrollado, incluyendo aquellos en Estados Unidos y Reino Unido, donde menos de un 30 por ciento dijeron sentirse felices.

Sólo un 8 por ciento de los jóvenes japoneses indicaron que eran felices.

Las razones de la infelicidad en el mundo desarrollado incluyen la falta de optimismo, la preocupación laboral y la presión por tener éxito.

En los países en desarrollo la mayoría de los integrantes del mismo grupo de edad esperan que sus vidas sean mejores en el futuro, encabezados por la juventud china, con un 84 por ciento.

"La gente más feliz en el mundo en desarrollo también es la más religiosa", indicó el sondeo.

La encuesta de MTVNI se llevó a cabo durante seis meses y comparó los sentimientos de los jóvenes basándose en sus percepciones respecto a la seguridad, dónde encajan en la sociedad y cómo ven su futuro.

Los jóvenes de Argentina y Sudáfrica encabezaron la lista de felicidad con un 75 por ciento.

El resultado general del Wellbeing Index estuvo más mezclado entre ricos y pobres. India se ubicó en el primer lugar de la lista seguido por Suecia, mientras que Brasil quedó en el último lugar.

"En los países en desarrollo, el crecimiento económico es continuo... por lo que esperarías lógicamente un sentimiento positivo y optimista", dijo a Reuters Bill Roedy, presidente de MTVNI.

Los países desarrollados se mostraron particularmente pesimistas acerca de la globalización, con un 95 por ciento de los jóvenes alemanes creyendo que está arruinando su cultura.

Mientras, los jóvenes de los países en desarrollo, que tienden a ser más receptivos a la globalización, son más optimistas acerca de su futuro económico y están más orgullosos de su nacionalidad.

MTVNI dijo que una de las tendencias observadas es que los jóvenes con acceso a los medios de comunicación masivos tienden a sentirse menos seguros que quienes no tienen las habilidades cognitivas para interpretar los riesgos reales.

En Reino Unido, más del 80 por ciento de los jóvenes de entre 16 y 34 años dijeron que tenían tanto temor del terrorismo como del cáncer, aunque consideraban que este último tenía mayor posibilidad de afectarlos.

Los 14 países incluidos en el sondeo fueron Argentina, Brasil, China, Dinamarca, Francia, Alemania, India, Indonesia, Japón, México, Sudáfrica, Suecia, Reino Unido y Estados Unidos."

1 comentario:

Anónimo dijo...

En casa, en la escuela, en los medias (prensa, TV, radio), en el trabajo, etc...continúamente nos orientan y nos alientan para tener éxito en nuestras vidas. Comprendiendo como éxito el desarrollar o alcanzar una actividad profesional acompañado con un módelo de vida bien establecido o dictado en la sociedad en la que nos desenvolvemos.

Reconocimiento profesional; altos ingresos, coche caro,;vacaciones caribeñas; familia módelica con niñxs en una buena escuela privada; casa con barbacoa, piscina, garaje en urbanización protegida las 24 horas; cuerpo esbeltico,etc...

Pocas veces o prácticamente ninguna de las veces que se piensa en el triunfo en la vida, nos salimos de esos parámetros tan marcados a fuego en nuestras mentes. Desde pequeños nos bombardean constantemente de esforzarnos al máximo para lograr reconocimiento y triunfo en la vida. Muchas veces inculcandonos los válores del "todo vale" en la jungla de la vida, lo que nos lleva a menudo a pisotearnos entre nosotros con tal de conseguir la "zanahoria agarrada al palo". Ese sobrevivir constante en la jungla nos hace infelices, desdichados, inseguros, violentos e idiotas. Somos capaces de destrozar nuestra salud en la búsqueda del máldito triunfo.: anorexia, drogas, alcohol, depresiones.

Valores como la solidaridad, el respeto, el apoyo mutuo y la amistad son códigos
en peligro de extinción, en este módelo de vida impuesto hipnóticamente por
intereses superiores.

Día a día lo vemos, oimos y leemos. Somos una sociedad frustrada: el nº de mujeres asesinadas; los maltratos y abusos sexuales a niños; maestros golpeados por alumnos y padres; trabajadores explotados;
el auge de los nacionalismos; el odio al diferente; el nivel de adicción a drogas,alcohol y a la TV; el fundamentalismo de las religiones; el aumento inparable de enfermedades mentales; en definitiva: la corrupción y la miseria en todos los ordenes de la vida.

Todas esas cifras y hechos demuestran que esta civilización esta fracansando y nos esta llevando al abismo humano y personal.